Los bailes más adictivos de la historia

Normalmente, cuando se hace referencia a la música pegadiza, recordamos diferentes estribillos que han marcado tendencia. Sin embargo, en muchas ocasiones esas canciones han ido acompañadas por bailes que podrían calificarse como “adictivos”, que causaron furor y que años después, seguimos recordando sus pasos. De hecho, si echas la vista atrás, es probable que descubras que conoces al dedillo los pasos de la mayoría de los bailes más adictivos de la historia.

¿Cuáles son las coreografías más populares?

Macarena

La famosa canción del grupo español Los del Río de 1993 logró convertirse rápidamente en un éxito a nivel mundial, junto al baile homónimo. En 1996 el grupo italiano Los Locos hizo una versión dance de este tema y también se convirtió en un gran éxito veraniego. Sin duda, este tema, que ganó varios discos de oro y platino, también se puede clasificar como uno de los bailes más adictivos de la historia.

Lambada

Este baile de origen latino se difundió inmediatamente por todo el mundo, a finales de los años ’80, cuando el grupo francés Kaoma interpretó una canción con el mismo título que logró vender más de 5 millones de copias. Hoy podemos afirmar que la lambada no solo se ha convertido en un uno de los bailes más adictivos de la historia sino que también es uno de los más eróticos.

Gangnam Style

No ha pasado mucho tiempo desde que el famoso rapero coreano PSY lanzó este nuevo estilo de baile, que gracias a Internet se hizo viral en un tiempo récord. El “baile del caballo”, como también se conoce este peculiar estilo, ha seducido a estrellas de la música como Madonna y Britney Spears, además de hacer bailar a muchos políticos de medio mundo.

Bomba

Este baile latino es originario de las Antillas y se cree que fue introducido por los esclavos. No obstante, nos referimos a un estilo de baile afro-puertorriqueño que ganó mucha popularidad gracias a la canción que lleva el mismo nombre y que salió a la luz en el año 2000, interpretada por King África.

Mayonesa

Esta coreografía se convirtió en uno de los bailes más adictivos de la historia gracias a la canción homónima del grupo uruguayo Chocolate, en el año 2000. El tema en sí es una mezcla de géneros como el candombe, la murga y la música tropical, y fue el que lanzó a la fama al grupo.